Cuando uno entra a la sastrería de don Telésforo Arambarri Rivera,  parece que el tiempo se ha detenido.

Algunos  trajes de distintos estilos, una antiquísima máquina Singer y un mesón de madera maciza son los objetos armonizan el lugar.

Allí pasa sus días el último sastre que queda en nuestra ciudad.

Según nos indico don Telésforo, un amigo que era su empleador,  debido a que  antes de realizar este oficio era vendedor en un local comercial en Rengo, le ofreció a  aprender el oficio de sastre,  desde ese momento  comenzó  a desarrollar este oficio el cual  le  permitió realizarse como persona.

Lleva más de 54 años confeccionando trajes, recordando que hace medio siglo en Rengo había más 8 sastrerías.

Agregando que este oficio lo aprendió de un conocido y reconocido sastre de Rengo, Orlando Peñaloza.

Nunca dejó su profesión sino todo lo contrario, a sus 81 años sigue abrazando su oficio y se lamenta de que ya no queden sastres.

También nos indico que antiguamente no daba  abasto por la demanda en la confección de trajes, que se daba previo al 18 de septiembre, en la actualidad lo mas que realiza son modificaciones y reparaciones de prendas.Lleno de buenos recuerdos Telésforo Arambarri recordó, sus mejores años cuando les confeccionaba trajes  a mucha gente importante.

Ya han pasado varios años de que aprendió el oficio de sastre y desde que se instalo en calle Arturo Prat, lugar desde cual nunca se ha cambiado.

Oficios del pasado, un reconocimiento al patrimonio, es un proyecto que cuenta con el apoyo del Fondo de Medios de Comunicación Social Regionales, Provinciales y Comunales año 2016, del Ministerio Secretaria General de Gobierno.